ENVÍO GRATIS PARA PEDIDOS A PARTIR DE 49 EUROS. 10% DE DESCUENTO A PARTIR DE 20 EUROS DE COMPRA CON EL CÓDIGO: #HELLOREIS.

w3c

Latest posts

EPILEPSIA EN PERROS Y GATOS

INTRODUCCIÓN

La epilepsia es una de las condiciones neurológicas más comunes que afectan a los perros. Se caracteriza por la aparición de convulsiones recurrentes y puede ser un desafío tanto para el animal como para su dueño. Comprender la epilepsia, sus causas, síntomas y opciones de tratamiento es fundamental para manejar esta condición de manera efectiva.

¿QUÉ ES LA EPILEPSIA?

La epilepsia es un trastorno neurológico que se manifiesta a través de convulsiones recurrentes. Estas convulsiones son episodios breves de actividad eléctrica anormal en el cerebro, lo que puede resultar en movimientos involuntarios, pérdida de conciencia o cambios en el comportamiento.

 

Existen dos tipos principales de epilepsia en perros:

 

EPILEPSIA PRIMARIA (IDIOPÁTICA): No se conoce la causa exacta, pero se cree que tiene un componente genético. Es más común en ciertas razas, como el Beagle, el Labrador Retriever y el Pastor Alemán.

 

EPILEPSIA SECUNDARIA: Resulta de una condición subyacente, como lesiones cerebrales, tumores, infecciones o enfermedades metabólicas. En estos casos, tratar la causa subyacente puede ayudar a controlar las convulsiones.

CAUSAS DE LA EPILEPSIA

Las causas de la epilepsia pueden variar ampliamente e incluyen:

 

GENÉTICAS: Algunas razas son más propensas a desarrollar epilepsia idiopática debido a factores hereditarios.

 

TRAUMATISMOS: Lesiones en la cabeza o traumatismos craneales pueden provocar convulsiones.

 

INFECCIONES: Enfermedades como la encefalitis o infecciones parasitarias (como la toxoplasmosis) pueden afectar el sistema nervioso central.

 

TUMORES: Los tumores cerebrales pueden causar convulsiones al presionar áreas del cerebro responsables del control motor.

 

ENFERMEDADES METABÓLICAS: Problemas como hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en sangre), enfermedades hepáticas o desequilibrios electrolíticos pueden desencadenar convulsiones.

 

SÍNTOMAS DE LA EPILEPSIA

Los síntomas de la epilepsia varían según el tipo y gravedad de las convulsiones. Algunos signos comunes incluyen:

 

CONVULSIONES TÓNICAS-CLÓNICAS: Movimientos involuntarios del cuerpo, rigidez seguida de sacudidas; el perro puede perder el conocimiento.

 

CONVULSIONES PARCIALES: Movimientos involuntarios limitados a una parte del cuerpo; el perro puede estar consciente durante este tipo de convulsión.

 

AURA: Algunos perros pueden mostrar comportamientos inusuales antes de una convulsión, como inquietud o búsqueda de atención.

 

POSTICTAL: Después de una convulsión, los perros pueden estar desorientados, confundidos o tener dificultad para caminar.

 

Es importante observar y registrar los episodios para proporcionar información precisa al veterinario.

 

DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

El diagnóstico de epilepsia generalmente implica varios pasos:

 

HISTORIA CLÍNICA COMPLETA: El veterinario recopilará información sobre los episodios convulsivos y cualquier otro síntoma observado.

 

EXÁMENES FÍSICOS Y NEUROLÓGICOS: Se realizarán pruebas para evaluar la salud general del perro y su función neurológica.

 

PRUEBAS DIAGNÓSTICAS: Pueden incluir análisis de sangre, radiografías o resonancias magnéticas para descartar otras causas subyacentes.

El manejo de la epilepsia en perros puede incluir:

 

MEDICAMENTOS ANTIEPILÉPTICOS: Los fármacos como fenobarbital, bromuro potásico y levetiracetam son comúnmente utilizados para controlar las convulsiones. La dosis debe ser ajustada por un veterinario según las necesidades individuales del perro.

 

CAMBIOS EN EL ESTILO DE VIDA: Mantener un ambiente seguro es crucial. Evitar situaciones estresantes y proporcionar rutinas consistentes puede ayudar a reducir la frecuencia de las convulsiones.

 

DIETA ESPECIAL: Algunas dietas específicas (como las dietas cetogénicas) han mostrado beneficios en algunos casos; sin embargo, siempre deben ser discutidas con un veterinario.

 

MONITOREO REGULAR: Las visitas periódicas al veterinario son esenciales para ajustar tratamientos y monitorear efectos secundarios potenciales.

 

CONCLUSIÓN

La epilepsia es una condición compleja que requiere atención continua y manejo adecuado. Aunque no siempre se puede curar completamente, muchos perros con epilepsia llevan vidas plenas y felices con el tratamiento adecuado.

 

Si observas signos de convulsiones en tu perro, es fundamental consultar a un veterinario lo antes posible para obtener un diagnóstico preciso y comenzar un plan de tratamiento adecuado. Con apoyo médico y cuidado responsable, puedes ayudar a tu mascota a vivir con esta condición mientras disfrutan juntos cada día.

Posted in: PERROS, GATOS

Leave a comment

Boxed:

Sticky Add To Cart

Font: