Adoptar un perro de una protectora o perrera es un acto de amor y compasión que cambia la vida de un animal. Sin...
Lo primero que tenemos que tener claro es que el conejo no es en absoluto un animal agresivo, no es un depredador, es una presa y, por lo tanto, en su ADN está el huir antes que el atacar, generando una naturaleza más nerviosa y asustadiza que otros animales como los perros y los gatos (que sí son depredadores).