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EL PERRO SIN PELO PERUANO
INTRODUCCIÓN
El viringo peruano, perro peruano sin pelo, perro calato, perro chimú o viringo es una raza de perro sin pelo originaria del Perú, empleada usualmente como animal de compañía. Ha sido reconocido oficialmente como Patrimonio del Perú.
EL ORIGEN DEL PERRO SIN PELO PERUANO
El perro sin pelo peruano, también conocido como Perro Peruano o Perro Sin Pelo del Perú, es una raza canina que posee una historia milenaria profundamente arraigada en la cultura y tradición de la región andina peruana. Sus orígenes se remontan a tiempos precolombinos, siendo considerado uno de los perros autóctonos más antiguos de América del Sur. Diversas evidencias arqueológicas y registros históricos indican que esta raza ya formaba parte de las comunidades indígenas mucho antes de la llegada de los españoles en el siglo XVI. En las antiguas culturas prehispánicas, especialmente en civilizaciones como la Nazca, Moche y Chavín, se han encontrado representaciones pictóricas y escultóricas que muestran a perros con características similares a las del actual perro sin pelo peruano, lo que evidencia su presencia y relevancia en la vida cotidiana, religiosa y simbólica de estas sociedades.
A lo largo de los siglos, este perro ha sido valorado no solo por su compañía sino también por sus cualidades funcionales y espirituales. En muchas comunidades rurales y urbanas del Perú, el perro sin pelo ha sido considerado un animal sagrado y protector, asociado a creencias religiosas y prácticas chamánicas. La falta de pelaje en estos animales no solo les confería ventajas en climas cálidos y secos propios de algunas regiones peruanas, sino que también les otorgaba un carácter distintivo que los diferenciaba de otras razas. La piel desnuda requería cuidados específicos para evitar infecciones o lesiones, pero también contribuía a fortalecer el vínculo entre el animal y su dueño, quien solía cuidarlo con gran dedicación.
Durante la época colonial, la presencia del perro sin pelo peruano fue relativamente estable en ciertas comunidades aisladas; sin embargo, con la llegada de los conquistadores y la posterior influencia europea en las costumbres locales, su población sufrió un declive progresivo. La introducción de razas europeas más modificadas genéticamente desplazó en muchos casos a las especies autóctonas, poniendo en riesgo la supervivencia del perro sin pelo peruano. No obstante, gracias al esfuerzo de organizaciones dedicadas a la conservación del patrimonio cultural y genético nacional, así como a grupos locales interesados en preservar sus raíces ancestrales, esta raza logró mantenerse viva en algunos sectores rurales donde su presencia aún es significativa.
En el siglo XX, el interés por rescatar y promover las razas nativas aumentó considerablemente. En 2001, el Perro Sin Pelo del Perú fue oficialmente reconocido por el Ministerio de Agricultura del país como una raza autóctona con valor cultural e histórico. Posteriormente, diferentes asociaciones cinológicas nacionales e internacionales comenzaron a interesarse por su conservación mediante programas de reproducción controlada y registro oficial. La adopción de estándares internacionales permitió que esta raza fuera presentada en exposiciones caninas tanto nacionales como internacionales, logrando reconocimiento en países donde las razas nativas latinoamericanas aún son poco conocidas.
Actualmente, el perro sin pelo peruano goza de un renovado interés tanto desde el punto de vista cultural como científico. Se le considera un símbolo vivo de la identidad peruana y un ejemplo claro del patrimonio biocultural que debe ser protegido frente a las amenazas modernas como la pérdida de hábitat o la reproducción indiscriminada. Desde una perspectiva genética, esta raza presenta características únicas relacionadas con su falta de pelo —que se hereda como un rasgo autosómico dominante— además de variaciones en tamaño y estructura física que reflejan su adaptación a diferentes ambientes regionales. Los programas actuales buscan no solo mantener su pureza genética sino también promover su bienestar mediante campañas educativas sobre sus cuidados específicos: protección solar para prevenir quemaduras cutáneas debido a su piel expuesta, higiene adecuada para evitar infecciones dermatológicas y atención veterinaria especializada.
En términos evolutivos, el perro sin pelo peruano representa un ejemplo vivo del proceso natural de selección adaptativa llevado a cabo por las comunidades originarias durante miles de años. Su resistencia natural a enfermedades cutáneas comunes en otras razas modificadas genéticamente refleja una evolución dirigida por las condiciones ambientales particulares del territorio peruano. Además, su carácter social y afectuoso lo convierte en un excelente compañero para familias modernas que valoran los animales con historia ancestral y significado cultural profundo.
¿CÓMO ES EL PERRO SIN PELO PERUANO?
APARIENCIA GENERAL: Según su conformación general se constituye como un ejemplar esbelto y elegante, cuyo aspecto expresa velocidad, fuerza y armonía sin parecer tosco. Existen dos variedades, la desnuda cuya característica principal es la ausencia de pelo en el cuerpo, y la variedad con pelo, recubierta con una capa que la cubre íntegramente. La variedad desnuda tiene entre una de sus particularidades la dentadura generalmente incompleta, asociada al factor ligado con su alopecia congénita.
PROPORCIONES IMPORTANTES: La relación entre la altura a la cruz y la longitud del cuerpo es de 1:1, permitiéndose el cuerpo de las hembras ligeramente más largo que el de los machos.
CABEZA: Conformación lupoide.
REGIÓN CRANEAL:
CRÁNEO: Mesocéfalo ortoide (la dirección de los ejes superiores cráneo faciales es paralela), aceptándose ligera divergencia. El cráneo visto desde la parte superior es ancho afilándose hacia la nariz. Los arcos superciliares son medianamente desarrollados. La cresta occipital es poco marcada.
STOP: Poco marcada (aproximadamente 140°).
REGIÓN FACIAL:
TRUFA: Bien pigmentada, el color de la nariz deberá armonizar con el color de la piel, en sus diversas tonalidades, en la variedad desnuda o con el color de la capa en la variedad con pelo.
HOCICO: Visto de perfil, mantiene una línea recta.
LABIOS: Los labios deberán ser lo más tirantes posible y adheridos a las encías.
MANDÍBULAS/DIENTES: Los incisivos deberán encajar para una mordida en tijera. En la variedad desnuda se permite la ausencia de uno o más piezas dentales. En la variedad con pelo la dentición debe ser completa con dientes de desarrollo y posición normal. La mandíbula es poco desarrollada. Mejillas: Normalmente desarrolladas, sin exageración.
OJOS: De expresión atenta e inteligente. Deberán ser de tamaño mediano, de forma ligeramente almendrada, ni hundidos ni saltones, con una ubicación normal y regular, es decir, ni muy cercanos ni muy alejados. El color podrá variar desde el negro, pasando por el castaño oscuro y en tonos descendentes hasta el amarillo, armonizando con el color de la piel en la variedad desnuda o la capa en la variedad con pelo. En todos los casos ambos ojos deberán ser del mismo color. El color de los párpados podrá ser desde el negro hasta el rosado para los ejemplares cuya zona facial sea clara, permitiéndose los de colores claros o rosados pero no siendo lo más recomendable.
OREJAS: Las orejas deberán ser erectas en atención, mientras que en reposo se encuentran pegadas hacia atrás. Las orejas son medianamente largas, anchas en la base y angostándose gradualmente para terminar casi en punta. Su inserción comienza sobre la parte superior del cráneo, terminando lateral y oblicuamente. Los ejes de las orejas en posición erecta pueden variar su ángulo entre sí, desde 50° hasta los 90°.
CUELLO
PERFIL SUPERIOR: Arqueado (convexo).
LONGITUD: Aproximadamente el mismo largo que la cabeza.
FORMA: Aparenta a la de un cono truncado. Flexible y de buena musculatura.
PIEL: Fina, lisa y elástica. Íntimamente adherida al tejido subcutáneo. Sin papada.
CUERPO: Mesomorfo.
LÍNEA SUPERIOR: Rectilínea, aunque ciertos ejemplares marcan una ligera convexidad dorso-lumbar, perdiéndose con la grupa.
CRUZ: Poco acentuada.
ESPALDA: Perfil superior rectilíneo, con músculos dorsales bien desarrollados, formando en muchos casos una biconvexidad muscular a lo largo de toda la región dorsal, prolongándose a la zona lumbar.
LOMO: Debe ser fuerte y musculoso. Su largo es aproximadamente 1/5 de la altura a la cruz.
GRUPA: El perfil superior es ligeramente convexo. Su inclinación respecto a la horizontal, forma un ángulo aproximado de 40°. De conformación sólida y musculosa, asegurando un buen empuje.
PECHO: El pecho visto de frente tendrá buena amplitud sin ser en exceso, descendiendo hasta casi el codo. Las costillas deberán ser ligeramente arqueadas y nunca planas. El perímetro del pecho medido por atrás de los codos deberá ser aproximadamente 18% mayor que la altura a la cruz.
LÍNEA INFERIOR Y VIENTRE: El perfil inferior es formado por una línea elegante bien marcada, que empieza en la parte inferior del pecho y termina en la retracción ventral, la cual deberá ser delineada sin ser excesiva.
COLA: La cola es de inserción baja. De buen grosor en el arranque, afilándose hacia la punta. En estado de acción la cola podrá elevarse formando una curva sin llegar a enroscarse sobre el dorso. En reposo la lleva colgando con un ligero gancho con la punta hacia arriba. En ocasiones la lleva metida hacia el vientre. Su largo llegará cerca o hasta el corvejón. La cola debe ser completa.
EXTREMIDADES
MIEMBROS ANTERIORES:
APARIENCIA GENERAL: Bien unidas al tronco; vistas desde adelante serán perfectamente aplomadas, no sobresaliendo los codos. Su ángulo escápulo humeral oscilará entre 100° y 120°. Vistas lateralmente, el ángulo resultante entre los metacarpos y la vertical es de 15° a 20°.
MANOS: Semilargos acercándose al pie de liebre. Las almohadillas son fuertes y resistentes al calor. Las membranas interdigitales son bien desarrolladas. De preferencia, las uñas son negras en los ejemplares negros y claras en los ejemplares más claros.
MIEMBROS POSTERIORES:
APARIENCIA GENERAL: Los músculos son redondos y elásticos. Las curvaturas de las nalgas son evidentes. El ángulo coxofemoral puede variar de 120° a 130°. El ángulo femoro tibial debe ser de 140°. Las extremidades vistas desde atrás son bien aplomadas.
PIES: Semilargos acercándose al pie de liebre. Las almohadillas son fuertes y resistentes al calor. Las membranas interdigitales son bien desarrolladas. De preferencia, las uñas son negras en los ejemplares negros y claras en los ejemplares más claros.
MOVIMIENTO: Debido a las angulaciones ya descritas en las estructuras de sus miembros, algunos de estos ejemplares se desplazan con un paso más corto pero más rápido y a la vez bastante amortiguado y flexible, en marcha o caminata y alargado en el trote. Las extremidades observadas tanto de frente como por detrás deben moverse en línea única.
PIEL: La piel será lisa y elástica en toda su superficie corporal, pudiendo formar ciertas líneas circundantes y casi concéntricas sobre la cabeza, alrededor de los ojos y de las mejillas en la variedad desnuda. Está comprobado que la temperatura interna y externa o dérmica, es exactamente igual a las otras razas. La ausencia de manto nos da por resultado una emanación de calor totalmente directa a diferencia de los ejemplares con pelos, en la que el calor se disipa a través de ellos por ventilación natural.
COLOR: El color de la piel en la variedad desnuda podrá ser negro, negro pizarra, negro elefante, negro azulado, toda la gama de grises, bronce, cobre, marrón oscuro en gradiente hasta el rubio claro. Todos estos colores pueden ser uniformes o presentar despigmentación en cualquier parte del cuerpo, de preferencia en el pecho, patas y cola, sin embargo, su extensión no deberá superar el 20 % de la superficie corporal. En igualdad de otras condiciones se prefieren los colores sólidos.
MANTO
- VARIEDAD DESNUDA (HAIRLESS): Será ausente de capa, admitiéndose sólo vestigios de pelos sobre la cabeza, en la punta de las extremidades, la punta de la cola y a veces algunos pelos muy ralos sobre el dorso. El color de estos pelos es aceptado en todas sus tonalidades y combinaciones.
VARIEDAD CON PELO (COATED): Con capa de manto liso, corto y apretado. El color de estos pelos es acepado en todas sus tonalidades y combinaciones, excepto el merle.
TAMAÑO Y PESO: Existen tres tipos de tamaños para machos y hembras.
- PEQUEÑO: de 25 a 40 cm
- MEDIANO: de 41 a 50 cm
- GRANDE: de 51 a 65 cm
El peso está en relación con los tres tamaños para los machos y para las hembras.
- PEQUEÑO: de 4 a 8 kg
- MEDIANO: de 8 a 12 kg
- GRANDE: de 12 a 30 kg
FALTAS: Cualquier desviación de los criterios antes mencionados se considera como falta y la gravedad de ésta se considera al grado de la desviación al estándar y de sus consecuencias sobre la salud y el bienestar del perro.
- Orejas semi-erectas, una o ambas.
- Mordida en pinza.
- Ausencia de un PM1 en la variedad con pelo
- Presencia de espolones.
FALTAS DESCALIFICANTES:
- Agresividad o extrema timidez.
- Cualquier perro mostrando claras señales de anormalidades físicas o de comportamiento.
- Prognatismo y enognatismo.
- Desviación de la mandíbula inferior.
- Falta de más de una pieza dental en la variedad con pelo.
- Orejas colgantes o cortadas.
- Lengua mantenida normalmente fuera de la boca.
- Ojos de distinto color (heterocromía)
- Anurismo.
- Braquiurismo.
- Cola amputada.
- Presencia de pelos en otros lugares del cuerpo en donde no se indica en la variedad desnuda.
- Despigmentación cubriendo más del 20% del cuerpo en la variedad desnuda.
- El color merle en la variedad con pelo.
- Nariz despigmentada total o parcialmente.
- Perros con talla mayor a los 65cm y menor a los 25cm.
- Albinismo.
N.B.:
- Los machos deben tener dos testículos de apariencia normal completamente descendidos en el escroto.
- Sólo los perros funcional y clínicamente saludables, con la conformación típica de la raza, deberían usarse para la crianza.
LA SALUD DEL PERRO SIN PELO PERUANO
La salud del perro sin pelo peruano, también conocido como Perro Sin Pelo del Perú, está influenciada en gran medida por sus características genéticas y su adaptación a las condiciones ambientales de su región de origen. Debido a la falta de pelaje, esta raza presenta una piel extremadamente sensible que requiere cuidados especiales para mantenerla en óptimas condiciones. La exposición constante al sol puede provocar quemaduras y daños cutáneos si no se aplican bloqueadores solares adecuados, por lo que es fundamental proteger su piel durante las horas de mayor radiación ultravioleta. Además, su piel desnuda es más susceptible a infecciones, irritaciones y lesiones, por lo que requiere una higiene rigurosa y regular para prevenir problemas dermatológicos. La limpieza frecuente con productos suaves ayuda a eliminar suciedad y bacterias que puedan causar infecciones, mientras que el uso de cremas humectantes o aceites naturales como el de almendras contribuye a mantener la piel hidratada y flexible.
Otra consideración importante en la salud del perro sin pelo peruano es su tendencia a desarrollar acné o lesiones cutáneas si no recibe los cuidados adecuados o si se somete a un exceso de limpieza con productos agresivos. La protección contra cambios bruscos de temperatura también es esencial; en climas fríos o húmedos, puede ser necesario cubrirlo con prendas específicas para evitar hipotermia o resfriados. La alimentación equilibrada y nutritiva fortalece su sistema inmunológico, ayudando a prevenir enfermedades comunes en perros con piel delicada. Es recomendable realizar revisiones veterinarias periódicas para detectar tempranamente cualquier problema dermatológico o de salud general, así como para recibir asesoramiento sobre productos específicos para su cuidado.
En términos generales, la salud del perro sin pelo peruano depende en gran medida del cuidado responsable y dedicado de sus propietarios, quienes deben estar atentos a las necesidades particulares de esta raza. La prevención mediante una adecuada protección solar, higiene constante y atención veterinaria especializada permite que estos animales mantengan una buena calidad de vida y disfruten plenamente de su carácter afectuoso y sociable. Aunque su piel sensible requiere atención continua, con los cuidados apropiados el perro sin pelo peruano puede vivir muchos años saludable y felizmente, siendo un símbolo vivo del patrimonio biocultural del Perú.
LA PERSONALIDAD DEL PERRO SIN PELO PERUANO
Los perros viringos son animales dóciles, inteligentes y tranquilos. Suelen ser confiados y cariñosos con sus tutores, aunque se muestran más cautelosos con los extraños. De esta forma, el carácter del perro sin pelo del Perú destaca por ser afectuoso con sus humanos de confianza. Así mismo, congenia tanto con niños como con otros animales. Se adapta muy bien a la vida en un piso.
CONCLUSIÓN
El perro sin pelo peruano ha desempeñado a lo largo de la historia un papel importante como guardián, gracias a su carácter atento y protector, cualidades que le permiten alertar ante cualquier situación sospechosa o amenaza en su entorno. Sin embargo, es fundamental aclarar que esta función no implica que sea un animal agresivo por naturaleza; al contrario, su temperamento suele ser equilibrado y apacible.
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