INTRODUCCIÓN

El perro Jindo (coreano: 진돗개; romanización revisada: Jindo-gae) es una raza canina autóctona de gran importancia cultural y histórica en Corea del Sur, específicamente originaria de la isla de Jindo. Reconocido por su belleza, agilidad y lealtad, este perro ha sido valorado durante siglos por su capacidad para la caza, su resistencia y su fidelidad a sus dueños.

EL ORIGEN DEL KOREA JINDO DOG

El perro Jindo, conocido en coreano como 진돗개 (Jindo-gae), es una raza autóctona de gran importancia cultural y patrimonial en Corea del Sur, específicamente originaria de la isla de Jindo. Este perro ha sido considerado durante siglos un símbolo de lealtad, resistencia y habilidades de rastreo, características que han contribuido a su fama y prestigio en la historia del país. También se le conoce como Jindo-gyeon (진도견), donde "gyeon" significa "perro" en coreano, y en tiempos pasados fue denominado como perro Chindo.

El origen del Jindo está profundamente ligado a la historia y cultura de la isla de Jindo, una región que ha preservado esta raza como un tesoro nacional debido a su valor histórico y simbólico. La raza se caracteriza por su fidelidad inquebrantable a sus dueños, así como por su agilidad y destreza para rastrear animales, cualidades que han sido esenciales para su supervivencia y utilidad en actividades tradicionales como la caza. La resistencia física, el carácter vigilante y la inteligencia del Jindo lo convierten en un excelente perro guardián y compañero.

Debido a su estatus de protección en Corea del Sur, solo los perros nacidos en la isla de Jindo pueden ser oficialmente registrados como Jindo por el gobierno tras una rigurosa inspección que garantiza su pureza genética y autenticidad. Esta protección especial busca preservar las características únicas de la raza frente a posibles mezclas o alteraciones genéticas que puedan diluir sus cualidades originales. La importancia cultural del Jindo ha sido reconocida internacionalmente, ya que fue registrado como raza por el United Kennel Club el 1 de enero de 1998 y posteriormente por la Federación Cinológica Internacional en 2005.

En resumen, el perro Jindo no solo representa un patrimonio vivo de Corea del Sur sino que también simboliza valores fundamentales como la lealtad, la resistencia y la habilidad natural para rastrear. Su historia está estrechamente vinculada a la identidad cultural de la isla de Jindo, donde se ha mantenido pura gracias a las estrictas regulaciones gubernamentales. La conservación y reconocimiento internacional de esta raza reflejan su importancia tanto histórica como biológica, consolidando al Jindo como uno de los perros más emblemáticos y admirados en Asia.

¿CÓMO ES EL KOREA JINDO DOG?

APARIENCIA GENERAL: El Korea Jindo Dog es un perro de tamaño mediano, bien proporcionado, utilizado para la cacería y como guardián. Sus orejas erguidas y su cola enrollada o en forma de hoz le confieren una expresión vívida de agilidad, fortaleza, vigilancia y dignidad.

PROPORCIONES IMPORTANTES: Relación entre la altura de la cruz: longitud del cuerpo = 10:10,5.

CABEZA: En general, la cabeza forma un triángulo obtuso vista desde arriba y no debe hacer que el perro parezca torpe o tosco.

REGIÓN CRANEAL: El cráneo es de tamaño mediano en proporción al cuerpo. La parte superior es ligeramente redondeada, y se adelgaza gradualmente hasta los ojos. La anchura entre las orejas es moderada en relación al tamaño de la cabeza.

STOP: Bien definido, pero no demasiado abrupto. Presenta un leve surco que se extiende hasta la frente.

REGIÓN FACIAL:

TRUFA: Negra. En caso de perros blancos, nariz de color carne es permitido.

HOCICO: El hocico no debe ser abultado ni levantado.

LABIOS: Negros; bien cerrados, son delgados y no pendulosos; el labio superior cubre ligeramente al inferior.

MORDIDA / DIENTES: Muy fuertes, mordida de tijera. Mejillas: Bien desarrolladas, delgadas y moderadamente redondas cuando se observan de frente o de lado; estrechándose hasta la punta de la nariz.

OJOS: Color marrón oscuro, algo pequeños en proporción al tamaño de la cabeza, de forma almendrada y muy expresivos. La comisura externa de ambos ojos está sesgada hacia las orejas.

OREJAS: De tamaño mediano, de forma triangular, gruesas y perfectamente erectas; orejas de inserción ni alta ni baja, dirigidas ligeramente hacia adelante en línea con la parte posterior del cuello. Es deseable la presencia de pelo fino y denso en el interior de las orejas.

CUELLO: Algo balanceado y grueso, sin papada, fuerte y con buena musculatura. El Korea Jindo Dog lleva su cuello con orgullo y bien arqueado cuando está excitado.

CUERPO

ESPALDA: Fuerte y recta.

LOMO: Con buena musculatura, tieso, delgado y más estrecho que la caja torácica.

PECHO: Fuerte y moderadamente profundo, pero no demasiado ancho. El punto más profundo del pecho alcanza un poco por arriba del codo, pero también es aceptable que llegue al nivel del codo. Costillas bien arqueadas. Tórax bastante desarrollado.

VIENTRE: Retraído.

COLA: Cuando cuelga, la punta de la cola debe alcanzar hasta la articulación tibio-tarsiana. Raíz de inserción más bien alta; es recta y firme y no debe oscilar cuando el perro se mueve. Sea en forma de hoz o enrollada, la punta de la cola toca la espalda o el flanco. No debe estar demasiado enroscada. La cola presenta pluma abundante.

EXTREMIDADES

MIEMBROS ANTERIORES:

APARIENCIA GENERAL: Vistos de frente, son rectos y paralelos.

HOMBROS: Fuertes y poderosos y bien inclinados.

CODOS: Pegados al cuerpo, sin desviación hacia afuera o hacia adentro.

METACARPOS: Ligeramente inclinados hacia adelante, cuando se observan de lado.

MANOS: Pies de gato. Dedos más bien cortos, redondeados, compactos y firmes. Uñas fuertes, de preferencia negras. Almohadillas gruesas y bien acojinadas.

MIEMBROS POSTERIORES:

APARIENCIA GENERAL: Vistos de lado, son moderadamente angulados; vistos desde atrás, son rectos, paralelos y no muy separados o muy cercanos entre sí. Los espolones deben ser extirpados excepto en los países en donde su excisión está prohibida.

MUSLOS: Bien desarrollados.

PIERNAS: Moderadamente anguladas.

ARTICULACIONES TIBIO-TARSIANAS Y METATARSOS: Colocados bien bajos; no son rectos pero moderadamente angulados.

PIES: Idénticos a los anteriores.

MOVIMIENTO: El movimiento del Korea Jindo Dog es poderoso y firme. La espalda debe permanecer firme y nivelada, y los miembros posteriores no deben oscilar. Al trotar lleva la cabeza en alto, pero al aumentar la velocidad, la cabeza es llevada baja, casi a nivel de los hombros. La parte superior de la cola se mueve ligeramente de acuerdo al cambio de dirección que realice el perro.

MANTO

PELO: El Korea Jindo Dog posee una doble capa de pelo. La capa interna es suave, densa, de color pálido, pero suficiente para sostener a la capa externa. La capa externa es tiesa y un poco separada del cuerpo. Comparado con el pelo que cubre el cuerpo, el pelo de la cabeza, miembros y orejas es más corto, y el del cuello, cruz, espalda y tronco es más largo. El pelo de la cola y parte posterior de los muslos es más largo que el del resto del cuerpo.

COLOR: Los colores del Korea Jindo Dog son el bayo rojizo, blanco, negro, negro y fuego, gris lobo y atigrado.

TAMAÑO Y PESO:

ALTURA A LA CRUZ:

• MACHOS: 50-55 cm
• HEMBRAS: 45-50 cm

PESO:

• MACHOS: 18-23 kg.
• HEMBRAS:: 15-19 kg.

FALTAS: Cualquier desviación de los criterios antes mencionados se considera como falta y la gravedad de ésta se considera al grado de la desviación al estándar y de sus consecuencias sobre la salud y el bienestar del perro.

• Musculatura insuficiente.
• Huesos demasiado gruesos o finos.
• Mordida de pinza.
• Orejas no erguidas.
• Cola colgante, cola corta.
• Angulaciones exageradas.
• Articulaciones tibio-tarsianas rectas, de vaca o de barril.
• Pelo largo o pelo corto.
• Paso irregular, paso tieso.

FALTAS DESCALIFICANTES:

• Agresividad o extrema timidez.
• Cualquier perro mostrando claras señales de anormalidades físicas o de comportamiento.
• Tamaño demasiado grande o demasiado pequeño.
• Prognatismo o enognatismo.
• Macho de apariencia femenina, hembra con apariencia masculina.
• Falta de más de 3 dientes.
• Falta de pigmentación, albinismo.

N.B.:

• Los machos deben tener dos testículos de apariencia normal completamente descendidos en el escroto.
• Sólo los perros funcional y clínicamente saludables, con la conformación típica de la raza, deberán usarse para la crianza

LA SALUD DEL KOREA JINDO DOG

El Jindo coreano es considerado una raza de perro fuerte y resistente, conocida por su longevidad y buena salud en general. Sin embargo, como cualquier raza, puede presentar ciertas predisposiciones a algunas enfermedades específicas. A continuación, se explica en detalle las afecciones mencionadas y otras posibles preocupaciones de salud que pueden afectar a esta raza:

• DISPLASIA DE CADERA: Es una alteración del desarrollo de la articulación de la cadera, que puede variar desde una ligera laxitud hasta una dislocación completa. 

• ENFERMEDAD DE VON WILLEBRAND: Trastorno hemorrágico hereditario causado por la deficiencia o anomalía en el factor von Willebrand, que ayuda a la coagulación sanguínea.

• ATROFIA PROGRESIVA DE RETINA (APR): Enfermedad degenerativa que afecta la retina y conduce a la pérdida gradual de la visión nocturna y diurna. Es hereditaria en varias razas caninas.

• DISTROFIA CORNEAL: Enfermedad hereditaria que provoca depósitos anormales en la córnea, afectando su transparencia y causando molestias o pérdida visual si progresa.

LA PERSONALIDAD DEL KOREA JINDO DOG

El Jindo es un perro que destaca por su lealtad y devoción hacia su familia, siendo uno de sus rasgos más característicos. Es inteligente y vivaz, aprende con rapidez, aunque en ocasiones puede mostrar cierta terquedad, lo que requiere paciencia y constancia en su entrenamiento. De tipo primitivo, el Jindo ha conservado muchos rasgos de carácter de sus ancestros salvajes; refleja una naturaleza independiente y orgullosa, pero no deja de ser afectuoso con sus seres queridos, formando lazos profundos y duraderos. Su instinto de caza y guardia sigue muy presente, lo que lo convierte en un excelente perro de protección natural, vigilante y alerta ante cualquier amenaza o situación sospechosa. Aunque suele ser reservado con personas desconocidas, el Jindo es muy sensible al estado emocional de sus dueños; percibe las emociones y puede reaccionar en consecuencia, mostrando empatía o afecto según corresponda. Tiende a crear vínculos fuertes con su familia y puede sufrir por la separación o la falta de atención prolongada. Por ello, una socialización temprana y adecuada es fundamental para que se convierta en un compañero equilibrado, confiado y sociable. Para convivir bien con un Jindo, es recomendable exponerlo desde cachorro a diferentes personas, animales y entornos para favorecer su adaptación social; utilizar métodos positivos y consistentes en su entrenamiento para manejar su terquedad sin generar conflictos; dedicarle tiempo a realizar ejercicio diario que estimule tanto su energía física como mental; y atender a su sensibilidad emocional mediante juegos, caricias y compañía constante. En resumen, el Jindo es un perro noble, protector y muy sensible a su entorno familiar. Con una socialización adecuada y mucho cariño, puede convertirse en un compañero leal, equilibrado y lleno de carácter que aportará mucha alegría a su familia.

CONCLUSIÓN

El Jindo coreano es un compañero leal e inteligente, ideal para dueños experimentados que buscan un perro guardián atento y un compañero deportivo. Su carácter independiente y su naturaleza primitiva requieren una educación coherente y una socialización temprana para que pueda desenvolverse de manera equilibrada en diferentes entornos y con distintas personas.