LOS LOROS NO DEBEN APOYARSE EN AROS DE METAL

El bienestar de los loros en cautividad depende en gran medida de la calidad del entorno que les ofrecemos. Un aspecto crucial —y a menudo subestimado— es el tipo de percha que utilizan diariamente.

PÁJAROS

11/17/20253 min leer

INTRODUCCIÓN

El bienestar de los loros en cautividad depende en gran medida de la calidad del entorno que les ofrecemos. Un aspecto crucial —y a menudo subestimado— es el tipo de percha que utilizan diariamente. Aunque los aros metálicos y las perchas artificiales se venden con frecuencia en tiendas de mascotas, muchas de ellas son inadecuadas para la anatomía y la salud de las patas de los loros. El uso prolongado de superficies incorrectas puede derivar en problemas graves como la pododermatitis, una inflamación dolorosa de la zona plantar. Conocer qué perchas son perjudiciales y cuáles son las adecuadas es imprescindible para garantizar la calidad de vida de estas aves.

¿POR QUÉ LOS LOROS NO DEBEN POSARSE SOBRE AROS DE METAL?

Los aros metálicos, aunque comunes en jaulas y juguetes, presentan varios problemas estructurales:

  • Mantienen un único diámetro, sin variaciones, lo que impide que el ave distribuya la presión de manera natural.

  • El metal es una superficie dura, fría y sin amortiguación, contraria al tipo de agarre para el que evolutivamente están preparadas las aves.

  • El contacto continuado con una forma y dureza tan homogénea favorece presiones repetitivas en la misma área de la planta, predisponiendo a irritaciones, lesiones y pododermatitis.


En libertad, los loros jamás emplean superficies así; se posan exclusivamente sobre ramas con irregularidades, que permiten un agarre dinámico y saludable.

OTROS TIPOS DE PERCHAS INAPROPIADAS: LISAS, DE LIJA O DE PLÁSTICO

Además de los aros metálicos, existen otros modelos que pueden comprometer seriamente la salud podal:

  • Perchas lisas (madera pulida, PVC, resinas): al no ofrecer textura, provocan resbalones y un agarre excesivamente tenso, lo que genera microtraumatismos repetidos.

  • Perchas recubiertas de lija: aunque se venden como “limapuntas”, su uso continuado abrasiona la piel plantar, causando irritación, heridas y dolor crónico.

  • Perchas de plástico: muchos loros tienden a masticar; el plástico puede fragmentarse y ser ingerido accidentalmente, con riesgo de obstrucciones intestinales o intoxicación.

LA CONSECUENCIA MÁS FRECUENTE: LA PODODERMATITIS Y CÓMO EVITARLO

La pododermatitis es una inflamación de la zona plantar causada por presión excesiva, falta de variación postural o superficies inadecuadas. Puede evolucionar desde una simple irritación a úlceras profundas, infecciones e incluso deformidades permanentes.

Factores que la favorecen:

  • Apoyar siempre la misma zona de la pata sobre superficies uniformes.

  • Falta de textura o irregularidades que permitan microcambios musculares.

  • Materiales abrasivos o demasiado duros.


Prevenirla es mucho más sencillo que tratarla, por lo que la elección correcta de perchas es una intervención esencial. Las perchas adecuadas deben imitar lo más fielmente posible el entorno natural del ave. Las recomendaciones básicas son:

  • Ramas de árboles frutales u otras especies seguras.

  • Con corteza, que ofrece textura y permite un agarre natural.

  • Diámetro variable: aproximadamente 3/4 del agarre de la pata, para que los dedos no cierren completamente ni queden demasiado extendidos.

  • Superficies irregulares, con nudos, pequeñas curvaturas y variación de grosor.

  • Ramas secas, lavadas y desinfectadas, libres de parásitos o productos químicos.

Además, es beneficioso ofrecer varias perchas de diferentes diámetros y texturas dentro de la jaula para promover el movimiento articular y evitar presiones repetitivas.

CONCLUSIÓN

Los aros de metal, las superficies lisas, las perchas de lija y muchas opciones de plástico no son adecuadas para los loros y pueden generar problemas graves como la pododermatitis. En cambio, las ramas naturales con corteza e irregularidades son la opción más segura, saludable y acorde con la biomecánica de estas aves. Adoptar perchas apropiadas no solo previene lesiones dolorosas, sino que favorece una postura correcta, un agarre natural y una mejor calidad de vida para cualquier loro en cautividad.